Remove ads by subscribing to Kanka or enabling premium features for the campaign.

Jefa de la guardia de la ciudad de Último puerto.

Click to toggle

Grupo de mercenarios que operan por las Llanuras de Sananda.

Click to toggle

En la enorme y salvaje extensión del Bosque de Ámbar, florecen entre los distintos pueblos de la región multitud de cultos y sectas dedicados a toda clase de dioses, filosofías y doctrinas. En algunas culturas, la religión y la espiritualidad son elementos fundamentales, como es el caso de los orcos y los mirienses. En el hostil bosque, con la guerra rugiendo desde hace décadas, enormes distancias y el aislamiento, los mirienses dan gran importancia al culto, especialmente en grupo ya que este refuerza los lazos de la comunidad.

Más extremo es el caso de los orcos, que entienden toda su sociedad, toda la existencia misma como un acto religioso. Muy distinto es el caso de la sociedad araina, donde la religiosidad permanece en un segundo plano de importancia (aunque a nivel personal puede ser un pilar esencial de muchas personas) debido a una fuerte tradición secular. Los elfos Indeverei tampoco son especialmente religiosos, si bien entre algunos jóvenes elfos adorar a la naturaleza como un dios está empezando a ser una opción popular.


Deidad 
Alineamiento 
Dominios sugeridos
Símbolo
Arastu 
LB
Prosperidad, Descubrimiento
Balanza con martillo y ladrillos
Praxis 
LN
Conquista, Sol
Espada de hierro
La Araña Primigenia
LM
Lo Salvaje, Conquista
Una enorme araña
Grokka 

Vida, Prosperidad
Un tetrasquel
Asakush 

Oscuridad, Descubrimiento
Una calavera
Kaladath 
CB
-Una hoja mecida por el viento
La Senda Estelar
CB
Sol, Descubrimiento
Camino rodeado de estrellas
Miskanel 
CB
Lo salvaje, Vida
Árbol creciendo bajo el sol
Elethae 
CB
Sol, Vida
Un brasero encendido
Digridhak 
CN 
Confusión, Descubrimiento
Una pluma plateada
Sokzhan 
CN 
Lo Salvaje, Conquista
Una herida sangrante
Talhi'bak
CM
Oscuridad, Descubrimiento
Una sonrisa con dientes afilados

Click to toggle

Cuando te caes mientras llevas este anillo, desciendes 60 pies por ronda y no recibes daño de la caída.

Click to toggle

Datos generales

Pueblo: 2972 habitantes (90 % vadanios, 5 % enanos, 2 % zabarios, 1 % higures, 1 % hipótidos, 1 % otros).
Límite de dinero: 1500 mo.
Guardias: Guarnición de 12 guardias y patrullas esporádicas.
Autoridad: El consejo de Antalare.
Religiones mayoritarias: Abadía de Ahuraz, Cofradía de Erekar.
Organizaciones: Orden de la Maza Exultante.

A la sombra de las escarpadas Montañas Esmeralda se encuentra, desde hace generaciones, el pueblo de Antalare. Donde las tranquilas aguas del río Kurhaza parten hacia Vadania dejando tras de sí las montañas, esta humilde población ha prosperado gracias a las explotaciones mineras emplazadas en las faldas de la cordillera. Aunque ocupa una gran extensión de terreno en la ladera y a lo largo del río, apenas un tercio de sus habitantes vive en el centro urbano, al que la mayoría de extranjeros llama Antalare, construido hace algo más de un siglo y en el que se concentran los edificios más importantes y se celebran los mercados y fiestas populares. El resto de sus habitantes se encuentran repartidos a lo largo de la ribera del río, donde es posible encontrar decenas de plantaciones, campamentos madereros y pequeñas explotaciones mineras regentadas por distintas familias llegadas a la región en tiempos más recientes.

Historia de la ciudad

Las Montañas Esmeralda, una colosal cordillera de riscos escabrosos y profundos valles apenas accesibles, esconden ingentes reservas de hierro y plata. Durante la época de los Peregrinos fueron muchos los esclavos que se vieron forzados a ascender a la cordillera y excavar durante años para acceder a las vetas de mineral, pero de todo aquel tiempo lo único que quedó siglos después fue una ingente cantidad de muertos vivientes que vagaban por la región ahuyentando a quienes rondaban cerca.

A pesar de toda la presencia de esclavos en la región durante la marcha de la raza de las estrellas, no fueron los descendientes de dichos esclavos los que fundaron Antalare. Este honor recae sobre un grupo de caballeros errantes que decidieron arrebatar el control de la región a los muertos vivientes que allí moraban y establecer sus propios dominios junto a las montañas. Sir Jojeff el Recio, quien había dirigido a sus camaradas de armas hasta las Montañas Esmeralda, fue elegido por sus iguales como primer gobernante del lugar, y las gentes de Antalare, que jamás habían aspirado a grandes objetivos, no dudaron en hincar la rodilla ante la corona de Vadania cuando sus emisarios se presentaron en la ciudad.

A los pocos años de la fundación de la ciudad se estableció que la responsabilidad de gobernar la región se repartiría en tres personas distintas: el alcalde, elegido por los habitantes cada diez años, el gran maestre de los Caballeros de la Maza Exultante y el abad de Antalare. A estos tres cargos se les conoce como el Consejo de Antalare, y toda gran decisión que tenga lugar en la ciudad debe ser consensuada por al menos dos de sus miembros.

Cultura y religión

La venta de armas y herramientas forjadas con el hierro que se extrae de las montañas es el principal producto de comercio, por lo que la mayoría de actividades que se realizan en Antalare están enfocadas a ello. Sin embargo, esto no es un negocio tan lucrativo como piensa la mayoría, puesto que todo mercader de Antalare debe donar una parte de sus beneficios a la Orden de la Maza Exultante y un diezmo a la abadía de Ahuraz. Esta deidad es adorada por gran parte de la población, que acude constantemente hasta la abadía para pedir al dios Ahuraz y al sol Avor que sigan protegiendo Antalare de los muertos vivientes que hace décadas poblaron estas tierras.

Cuando sir Jojeff el Recio purgó el mar de estas tierras hace más de cien años, trajo consigo un espejo de plata pulida, curvo y de gran tamaño, regalo que un rey de tierras lejanas le hizo durante sus aventuras de su juventud. Dicho espejo está colocado en lo alto de la Torre Argéntea, en el centro del pueblo, y reluce con la gloria de Ahuraz en los siete momentos del día en los que los rayos de Avor cruzan el tamiz de hierro entrecruzado que cubre la parte superior de la torre.

Las leyendas sobre Nothsa, un valle perdido entre las Montañas Esmeralda, en el que el antiguo tirano Chraunnus escondió sus valiosos tesoros, han atraído un flujo constante de eruditos y aventureros durante generaciones. Aunque no hay nadie que tenga información real al respecto de este lugar, existe un acuerdo tácito por parte de los vecinos de alimentar este tipo de rumores y leyendas, atrayendo así a toda clase de curiosos para enriquecerse gracias a ellos.

Click to toggle
Instigator
Nanna Hanish

Nanna Hanish solicita a los héroes que encuentren a la expedición de Xarkaz. Hace más de dos días que no envían reportes y se teme lo peor. Tratar de encontrar la expedición y traerla de vuelta en cualquier estado es la máxima prioridad. También pide que se trate en secreto esta misión.

Click to toggle

Entity list

Kukins 8 months ago
Kukins 8 months ago
Kukins 8 months ago
Kukins 8 months ago
Kukins 8 months ago
Kukins 8 months ago
Kukins 8 months ago
Kukins 8 months ago
Kukins 8 months ago