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Ciudadanía
La ciudadanía solo está abierta a aquellos de pura ascendencia Phantasiana, e incluso los extranjeros que han nacido y se han criado en la ciudad celeste nunca serán reconocidos como ciudadanos.
La Alta Nobleza
Aunque todos los Phantasianos se consideran élite, diez familias se consideran realmente nobles entre los Phantasianos. Estas familias, cada una descendiente de los miembros de la Cábala que una vez gobernaron a los Elandar, son las siguientes: Bandaric, Teloriano, Dachantes, Shardrose, Weirthorn, Mordredir, Kassilmar, Ræmir, Xavios, Sirdrake.
Impuestos
Todos los ciudadanos de Cabal Magicus pagan un impuesto general del 50% sobre todas sus ganancias, cuyos ingresos se utilizan para pagar el mantenimiento, mantenimiento, gobernanza y protección de la ciudad celestial, y el elixir nutritivo diario gratuito al que tiene derecho cada Phantasiano.
Propiedad Pública y Privada
Aproximadamente el 70% de las propiedades en Cabal Magicus son de propiedad pública. El resto es propiedad de esos Phantasianos que son miembros de las diez familias más prominentes de la ciudad, los únicos individuos que están autorizados a comprar y poseer propiedades en Cabal Magicus. No hace falta decir que incluso estas familias ya no poseen el poder financiero necesario para comprar más propiedades.
Abuso de la Esencia
Aunque las ventas de Esencia Onírica están cayendo, porque pocos pueden permitirse un lujo tan costoso, el abuso de la sustancia se está volviendo cada vez más común entre los Phantasianos hastiados y deprimidos.
Sueños Lúcidos
Muchos Phantasianos, especialmente aquellos involucrados en el comercio de sueños, aprenden a controlar el contenido de sus sueños, ya que esta habilidad les permite adaptar los sueños para el proceso de destilación, y les permite utilizar mejor la Esencia Onírica.
El Desvanecimiento de la Opulencia
A medida que ha ido disminuyendo la fortuna de los Phantasianos, han ido descubriendo que ya no pueden permitirse las extravagancias a las que estaban acostumbrados. Los costosos alimentos importados han dado paso a una dependencia casi total de la hidroponía, por lo que muchos de los antaño hermosos jardines de las torres han sido reconvertidos al cultivo de productos alimenticios, como la Proveedora. Algunos de los Phantasianos más pobres incluso han tenido que comenzar a beber el agua estéril que recicla la arqueología.