Morral de piel de cabra
Túnica marrón raída
Botas rotas
Humanos torpes y mentirosos. Creen que sus asuntos son los más importantes cuando en realidad no tendrían ninguna importancia de no haberlos salvado de una o varias muertes horribles. Me lo deben, tienen que conseguirme mi barco. Primero me dan dos Esquifes voladores y después me los quitan en la ciudad como prueba para el juicio del atolladero del que les he sacado.
Correré la voz entre los ferranos de esta ciudad para que se embarquen, escondidos a los ojos de los humanos cegaratos en la bodega, entre barriles y cajas. Cuando su barco volador llegue a Cábala Mágicus para asistir al juicio, lo harán con una buena rehala de ferranos a bordo, y colonizaremos esa ciudad de rubios y adormilados phantasianos, colmando nuestros escondites de comida y tesoros abandonados al descuido.
Y yo, Pekk Fezz, seré reconocido entre los míos como el Encontrador más grande de todos los tiempos, del colonizador que hará de esa ciudadela flotante, el paraiso ferrano al que todos desearan unirse.