La
palabra Grambachmalak es utilizada indistintamente por los orcos para
referirse tanto al concilio de druidas que forman el Círculo de la
Pureza del Bosque de Ámbar como para nombrar el lugar que habitan en
el corazón del bosque. Este grupo de druidas, rodeado de un aura de
misticismo y misterio, guían al conjunto de clanes orcos y luchan
para expulsar la corrupción de los Peregrinos de este milenario
bosque.
Sus
orígenes se remontan cientos de años, cuando los orcos descubrieron
a la dragona verde Sulzebor y esta los acogió como su pueblo
protegido. La vieja sierpe eligió a siete jóvenes orcos para que la
sirviesen durante una década, comprometiéndose a enseñarle al más
apto de ellos todos sus conocimientos sobre la naturaleza. Este
proceso se ha repetido cientos de veces, dando cada década un nuevo
druida que se une al Grambachmalak, perdiéndose para siempre el
resto de candidatos, quienes permanecen en Tharmetharan hasta ser
consumidos por las esporas del ponzoñoso lugar.
Aunque
la mayoría de los druidas del círculo han sido enseñados, hay
druidas que han nacido con un gran don o han alcanzado profundas
conexiones con la tierra y han sido aceptados en el
Grambachmalak. Estos druidas dedican su vida a sanar el Bosque de
Ámbar, luchando de manera directa contra las aberraciones dejadas
atrás por Sathnamil y otros peregrinos.
Aunque
durante siglos han tratado de no confrontar a los grandes trasgos de
Sagar, a quienes consideran posibles hermanos, las incursiones en las
Tierras Boreales cerca de Tharmetharan han forzado al círculo
druídico a ir a la guerra. No luchan como un ejército pues dos o
tres druidas son suficientes para acabar con un asentamiento trasgo
asfixiando a sus trabajadores con enredaderas y espinos o desatando
la furia de los animales contra ellos.
La
mayoría de los druidas viajan por las Tierras Boreales formando
parte de los grandes clanes, moviéndose de uno a otro siguiendo sus
propios caprichos. El archidruida escogido cada cierto tiempo por el
Círculo y su entorno cercano
permanecen permanentemente en Grambachmalak para recibir a los jefes
de clan que acuden buscando consejo. Cuando surgen grandes crisis o
tiempos de cambio, todos los clanes son convocados a este lugar para
realizar el Concilio de Clanes, donde el archidruida guía la reunión
y ejerce de juez en caso de ser necesario. Durante este acto es muy
común que los jefes de clan porten con ellos trofeos de hueso y
madera tallados que representan los logros de su clan. Cuando la
reunión termina, todas las tallas ceremoniales se intercambian entre
jefes como símbolo de unión y fraternidad.