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  1. Quests

Fragmentos de la extraña oscuridad

Completed
Historia principal

Tras una semana de viaje después de los acontecimientos de la casa del embajador, los héroes llegaron a Tabalard, donde descansaron un poco en la taberna El mediano dorado, del excéntrico mediano Gimpir y su ayudante de cocina Kikkara

Pasaron el día conociendo la ciudad y a los miembros más importantes que habitaban en ella, así como intercambiando historias entre ellos. 

Caída la noche, una estruendosa explosión procedente de las murallas del sur alertó a los ciudadanos de Tabalard que corrían hacia la dirección contraria asustados. Los héroes se apresuraron a ver los acentecimientos que generaban esos ruidos. Al llegar observaron a un gran constructo metálico destruyendo las casas de los alrededores de la ciudad. 

Tras una ardua batalla consiguieron vencer a la bestia y procedieron a investigar. Pudieron ver que la bestia se movía gracias a un extraño cristal de Xion que poseía una energía no vista antes. También divisaron el escudo de la Cofradía de Erekar en el constructo. 

Luego llegó la capitana de la guardia de Tabalard, Bethari Drakpa y junto a sus hombres socorrió a los ciudadanos heridos y atrapados por los escombros. Les pidió a los héroes, visto su poder, que se encargaran de investigar qué había desencadenado este incidente. Les entregó una autorización de investigación y les pidió que preguntaran a los magos de la cofradía de Erekar. 

Allí les citaron para el día siguiente, el cual asistieron. Por la mañana hablaron con el responsable de las investigaciones mágicas en Tabalard, Neokazu, un experimentado mago karasu, que se mostró colaborador en todo momento y les comentó que el constructo estaba en reserva de Akalis Krovo para sus investigaciones. Al ser Akalis miembro de la Cofradía de Erekar, tenía un despacho en el propio santuario de Erekar y les condujo hasta allí, donde encontraron pistas que les llevaron más tarde a la propia casa del mago como a la de su ayudante, la joven mida Malisa Samak

En el hogar de Malisa se encontraron a los Matones de Killoran, que pretendían robar y destruir la propiedad de la aprendiz por odio y racismo. Los héroes los detuvieron y terminaron de encontrar las piezas del puzzle que les faltaban para dirigirse hacia un viejo granero abandonado, donde cavaron un túnel que les llevaría hasta uno de los laboratorios de Chraunnus el extinguido, el peregrino. 

Una vez allí encontraron el cuerpo sin vida de Malisa y más adelante a Akalis manteniendo una lucha con la Extraña Oscuridad. Los héroes destruyeron los cristales que sostenían el portal, lo que forzó el cierre del mismo, arrastrando a Akalis hacia el otro plano. Al cerrarse completamente se produjo una gran explosión que hizo que se abriera un gran agujero en el techo y en el suelo. 

Tras un encontronazo con un dragón que descendió del techo, regresaron a la entrada del granero y Bethari ya se encontraba allí con sus hombres. Recibieron la recompensa de la felínida y regresaron a Tabalard para descansar en la posada.